Hablemos de Córdoba

FUENTE: DIARIO ABC 27/09/2006

El atractivo turístico de la ciudad de Córdoba refleja hoy en día nítidamente el protagonismo que en tiempos pasados le correspondió. Todas las culturas que la han poblado han dejado su huella: romanos, árabes, la judíos y cristianos dejaron como testimonio un patrimonio histórico-artístico de gran singularidad. Situada a orillas del Guadalquivir, la capital se deja pasear por los visitantes a ambos márgenes del río y éstos se dejan envolver por la magia de la Calleja de la Flores, encajada en el contorno cercano a la Mezquita, en pleno barrio de la Judería, por los naranjos de San Fernando, antigua calle de la feria, el Arco del Portillo, abierto en la muralla transversal en el siglo catorce o la calle Cabezas, con sus siete arquillos relacionados con la muerte de los siete infantes de Lara. Parada obligada son las plazas cordobesas, como la de la Corredera, única porticada de Andalucía, la de los Dolores, donde se encuentra el famoso Cristo de los Faroles o la entrañable plaza del Potro, un magnífico ejemplo de recinto cervantino.
Aunque sigue siendo el principal reclamo turístico, la mezquita-catedral es tan sólo un elemento más de la amplia oferta que Córdoba hace a sus visitantes. En sus cercanías se levanta el Alcázar de los Reyes Cristianos, edificio de estilo gótico, de carácter militar, construido por orden del rey Alfonso XI en el año l328 y a la falda de la sierra cordobesa existe uno de los conjuntos arqueológicos más importantes de España: Medina Azahara. En nuestro recorrido nos toparemos, casi sin buscarlos, con varios triunfos de San Rafael, para llegar poco después hasta el Palacio de los Marqueses de Viana, una casa señorial del siglo catorce conocida también como Museo de los Patios. Los baños árabes de Hamman son un lugar ideal para descansar y tomar fuerzas, un espacio de ensueño, recuperado de una tradición perdida.
Para comer
Tras un baño «a la antigua usanza» llega la hora de comer. Córdoba es hoy la capital gastronómica de Andalucía, ya que algunos de sus profesionales se han esforzado por aplicar criterios innovadores a la cocina recuperando recetas mozárabes o judías o incorporando criterios de selección de calidad a los platos más tradicionales. Entre estos últimos destaca por encima del resto el salmorejo, salsa hecha con un gazpacho espeso para tomar con cuchara o mojando pan y acompañada de guarnición. Típicos también son los flamenquines, las alcachofas a la montillana o algunas recetas árabes como el cordero a la miel. Las carnes de caza se preparan de forma muy sabrosa, especialmente las de venado, jabalí y, en caza menor, la perdiz. En cuanto a los postres, hay que probar el pastel cordobés, hecho con hojaldre y, en su versión más clásica, cabello de ángel y jamón serrano.
Una vez saciado el apetito y con energías renovadas nos vamos a ver iglesias porque el Obispado y el Consorcio de Turismo de Córdoba han organizado la «Ruta de las iglesias fernandinas», con tres recorridos diferentes que estarán listos para el próximo mes de octubre. Cuando
Fernando III El Santo reconquistó Córdoba en el verano de 1236 organizó la ciudad mediante la fundación de catorce parroquias, cuyos templos fueron erigidos entre finales del siglo trece y principios del catorce. Estas construcciones, con definidas aportaciones mudéjares, pueden clasificarse como pertenecientes al momento de transición del románico al gótico. La existencia de estos templos góticos cordobeses demuestra que hubo en Andalucía una auténtica escuela de arquitectura ojival. Pueden estimarse como más importantes La Magdalena, San Andrés, San Lorenzo, Santa Marina, San Pedro, Santiago, San Miguel y San Nicolás de la Villa. Todos estos templos fueron revestidos de caracteres barrocos en los siglos diecisiete y dieciocho.
Para vivir
En este entorno monumental se desarrollan algunas de las celebraciones que han hecho que el mayo cordobés se conozca en todo el mundo: las cruces, los patios, rejas y balcones, tradiciones únicas basadas en la peculiar forma de vida cordobesa que impregnan de aroma y color las calles de la capital.
Otra de las citas ineludibles de este mayo festivo es la Cata del Vino, por la importancia del sector vitivinícola. Cercana en el tiempo pero con un cariz totalmente diferente se celebra la Semana Santa, que tiene sus raíces a mediados del siglo dieciséis, cuando se crearon cofradías penitenciales para venerar escenas de la pasión y muerte de Cristo. El día de San Rafael también se vive al aire libre, pero no en las calles de la ciudad, sino en el campo, de perol, una costumbre que se ha mantenido viva de generación en generación.
En época estival la oferta de ocio de la ciudad está en las «Noches de embrujo». Córdoba se convierte todos los veranos en un grandioso escenario de múltiples resonancias. La historia, el arte y la cultura de este Patrimonio de la Humanidad se abren al público espectador y lo seducen en las cálidas noches. En el programa de actividades se da cita un mosaico multicultural de artistas de toque flamenco, danza contemporánea, música clásica, jazz o teatro, que abarcan todos los estilos y formas de interpretación. Durante varios meses se suceden festivales internacionales, muestras nacionales, jornadas, ciclos, paseos guiados y mucho más, formando un gran espectáculo cultural.
Con el buen tiempo también aparecen las ganas de practicar algún deporte. En los últimos años se ha multiplicado la actividad golfista en el Club de Campo, situado a tan sólo nueve kilómetros de la ciudad, en el marco natural de la serranía cordobesa. Sorprende el campo por su variada fauna y es conocido por su duro recorrido. Sus dieciocho hoyos transcurren entre una gran arboleda, pues la naturaleza le ha proporcionado un entorno difícil de encontrar en otro lugar.
Resulta difícil condensar en unas cuantas páginas los atractivos que ofrece al visitante esta ciudad. En Andalucía se reparten destinos turísticos muy variopintos, pero lo cierto es que Córdoba y el resto de los municipios cordobeses han sido desde tiempos antiguos un enclave para viajeros, curiosos y turistas.

LLLLLEGA211769
Utilizamos cookies propias y de terceros con fines analíticos para medir y cuantificar la utilización de la web por los usuarios con el fin de mejorar la oferta de servicios que le ofrecemos. Clica AQUÍ para más información. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”, rechazar todas pulsando “Rechazar” o configurar su uso pulsando el botón “Configurar
AceptarRechazarConfigurar